El pasado jueves, 20 de enero, un concejal, al parecer del tercio familiar, adscrito al grupo del Partido Gurtelar, viendo cómo un joven bloguero, al parecer perteneciente al tercer mundo, grababa el desarrollo del pleno que se celebraba en el Ayuntamiento de Cáceres, se levantó y con andar parsimonioso y seguro de sí mismo y su misma mismidad, dirigióse al bloguero del tercer mundo, asióle por el brazo y ordenóle que cesara en la grabación, diciéndole: “Tú, a mí, no me grabas”. Y repitióle las dichas palabras.
Esto sucedió así, tal cual, en el salón de plenos de un ayuntamiento democrático, cuando un concejal del Partido Gurtelar, sin duda visiblemente nervioso por el desarrollo del pleno en el que se evidenciaron carencias y derrotas de su partido, se acercó a un joven bloguero para conminarle, con la autoridad que le da el saber que es una autoridad, hacer uso de ella. Pero ni caso. El blog circula por la red.
http://www.youtube.com/watch?v=ZtRwB3aJldI
La actitud del concejal se debe, sin duda, al nerviosismo que le ataca, bien porque presenció la amarga conversación entre su jefa, Elena Nevado, embajadora del tercer mundo en Extremadura, con el mamporrero oficial del partido de la derecha, el tal Pavón, dizque comunista o izquierdoso, pero más en el papel que en los hechos. También se debe a la falta de acuerdo en el grupo parlamentario a la que pertenece el concejal Quehavuelto a perder el Rumbo en asuntos que se debatían en el pleno y que lastran la unidad de un grupo que en cualquier momento puede darnos días de gloria y titulares jugosos a los boletines locales.
Con ser grave, por antidemocrática, la actuación del concejal Rumbo de la Montaña (J.J. como otros Jotas Jotas famosos: Vázquez, González, Santos...), también es de lamentar que el incidente, presenciado por los representantes de los medios de comunicación, que eran muchos por los importantes asuntos que se debatían, no haya tenido ningún reflejo en los medios. Ningún medio de comunicación, de los presentes en el pleno y que conocieron de primera mano el incidente ha hecho referencia. Se da la circunstancia de que el increpado es, simplemente, un bloguero, un joven que publica una página, de notable éxito (www.13rosas.com). Si la amenaza se hubiera cernido sobre un periodista comme il faut, hoy estaríamos hablando de un ataque a la libertad de expresión. El mismo ataque a la libertad de expresión que sufrió el bloguero increpado. Es de esperar que en los próximos tiempos ningún periodista de los medios locales o regionales se queje de falta de libertad de expresión. Al menos yo me encargaré de recordarle su hipocresía.
En cuando al concejal Rumbo de la Montaña, mal, muy mal le tienen que ir las cosas en las previsiones de las próximas listas cuando da ejemplo de tan poco valor democrático y cuando puede verse relegado a la última fila, como cuando en la mili a los que no sabían marcar el paso se les echaba para atrás. A ver si va a ser eso, que en las listas del Partido Gurtelar están volviendo a la mili...
Vale.
1 comentario:
la verdad es que cuando lo vi pensé que terminaba golpeándole , menudo enfado
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