Hoy, 29
de diciembre de 2012, el gobierno del Partido Popular trae de regreso
a España al condenado Carromero por la muerte, en accidente de
tráfico, de dos disidentes cubanos. Mientras, varios cientos de
españoles, condenados por delitos menos graves en otros muchos
países esperan que el gobierno sea tan diligente. Un consejo a todos
esos españoles desamparados por el Partido Popular: afiliénse.
Seguro que en un partido con tanto corrupto el que unos cuantos
delincuentes menores ingresen en sus filas no se notará.
Pero a lo
que vamos. Carromero causó la muerte con su imprudencia de dos
personas, de dos disidentes cubanos. De dos ultraderechistas cubanos.
La
reacción primera del PP en España y, sobre todo, de la caverna
mediática, fue la de culpar de las muertes a los servicios secretos
de la “dictadura” castrista. La realidad, en pocas horas, dejó a
todos esos agitadores profascistas con el culo al aire.
Por
cierto, la detención ilegal de Alfon en nuestro país demuestra,
seguramente, que nuestra democracia es más profundamente injusta que
la dictadura castrista.
¿Qué
hacía Carromero en Cuba? Oficialmente turismo.
Pero el
accidente de tráfico dejó muchas dudas, sin resolver la mayoría de
ellas porque los partidos políticos en nuestro país no afinan en
sus preguntas, y los medios de comunicación, los grupos mediáticos
están todos, son todos, de la derecha y la extrema derecha.
¿Era el
primer viaje de turismo de Carromero a Cuba? No hay respuesta.
¿Cuánto
dinero llevaba, en metálico, Carromero para entregar a los
disidentes ultraderechistas cubanos? Algún rumor por ahí dice que
3.000 euros. Pocos me parecen para un único viaje.
Pero
sabiendo ya como se sabe y no hay desmentido alguno, porque no puede
haberlo, ya que el acompañante sueco que también iba en el Hyundai
que estrelló el cachorro del PP, lo ha reconocido, estamos ante un
caso de financiación de grupos políticos en países extranjeros.
¿Era la
primera vez que el Partido Popular hacía entrega de dinero a
disidentes cubanos? No hay respuesta... pero se intuye.
Y como
esto es público y notorio, como es pública y notoria y ha quedado
palpablemente demostrada con el piloto Carromero, ahora vienen
preguntas que ningún medio de comunicación en España ha hecho y no
hará, no porque no se atreva, sino porque están de acuerdo con esa
financiación ilegal.
¿El
dinero que llevaba Carromero, y el que habrá llevado otras veces, o
habrán llevado otros conmilitones suyos, es dinero del Partido
Popular? Lo dudo. El PP está para recoger, que para eso tienen sus
brazos financieros. Gürtel, por ejemplo. O Seguros Mercurios, de
Diaz Ferrán.
Pero lo
más probable es que el dinero no sea de los fondos del Partido
Popular, sino que el dinero que llevó Carromero en ese viaje, el que
llevara antes y el que llevaran otros camaradas (en el sentido
falangista del término) antes y llevarán después, sea dinero
público, dinero sustraído, por cualquiera de los métodos de
ingeniería administrativa y contable, tan queridos a la derecha.
¿Por qué
nadie ha preguntado cuánto dinero era realmente el que llevaba
Carromero? ¿Por qué nadie ha preguntado si era el primer viaje con
esa finalidad que hacía el lucero de NNGG? Esta pregunta tienen
fácil respuesta: en el control de pasaportes se sabrá. ¿Por qué
nadie ha preguntado de dónde, cómo y cuándo salía ese dinero?
¿Por qué nadie ha preguntado si ese dinero es público?
¿Preguntas
sin respuesta? No. Preguntas que nunca nadie hará. Para eso vivimos
en un país democrático y las muertes causadas por Carromero
tuvieron lugar en un país regido por una dictadura.
Finalmente, queda por saber, y no se sabrá porque nadie lo preguntará, cuánto, en euros o dólares contantes y sonantes, ha pagado el gobierno del Partido Popular, de nuestro dinero, de nuestros impuestos, para traer a España a semejante inútil.
Finalmente, queda por saber, y no se sabrá porque nadie lo preguntará, cuánto, en euros o dólares contantes y sonantes, ha pagado el gobierno del Partido Popular, de nuestro dinero, de nuestros impuestos, para traer a España a semejante inútil.
Vale.
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